Número de Registro: 26-56 | |
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Título: | El Divino amigo de los niños |
Creador: | Benito Rebolledo Correa |
Institución: | Biblioteca Nacional |
Fecha: | 1924 |
Ficha de registro
Identificación
Institución
Biblioteca Nacional
Número de registro
26-56
Nº de inventario
26.67
Clasificación
Arte - Artes Visuales
Colección
Pintura
Alto 192 cm - Ancho 300 cm
En exhibición - Biblioteca Nacional - 1
Esquina inferior izquierda firma y la fecha, “B. Rebolledo Correa. 1918”
Bastidor: “Fernando – 2007 - , Fe Broedo”
Título
El Divino amigo de los niños
Descripción
Composición horizontal que representa a un grupo de personajes en un paisaje de playa, donde se hace posible observar de fondo el mar. Al centro una figura masculina que representa a Jesús, se presenta de cuerpo completo, sentado y vestido con una túnica blanca, junto a él un niño desnudo. En torno al personaje central se encuentran una serie de niños desnudos, algunos en brazos de figuras femeninas. En el segundo plano, sobre la arena, se observa una embarcación a vela, y un hombre mayor junto a estas velas y en tercer plano se observan una serie de niños desnudos que van saliendo de mar.
Estado de conservación
Bueno
Contexto
Área geográfica
Chile
Lugar de creación
Santiago
Fecha de creación
1924
Historia de propiedad y uso
Estuvo en préstamo en la biblioteca pública N°7 hasta el año 1985.
Historia del objeto
La escena recrea un pasaje que se describe en el Nuevo Testamento, Marcos 10,13-16; Lucas 18, 15-17 y Mateo 19:13-15: “Y le presentaban niños para que los tocase; y los discípulos reprendían a los que los presentaban. Viéndolo Jesús, se indignó, y les dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. De cierto os digo, que el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él. Y tomándolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendecía.
Esta pintura es vista por el artista como una forma de contrarrestar lo feo, lo malo, un instrumento para “educar” y “enseñar”. Se sabe por el artículo de 1959, de la revista En Viaje, que Rebolledo “consideraba los planteamientos de la Biblia como una filosofía integral y permanente” por lo que, para él, es una fuente de inspiración y recurre a ella, para representar capítulos que él consideraba importantes para la conciencia moral de la sociedad. Rebolledo tiene necesidad de unir su fe cristiana en su obra artística, y tiene la oportunidad de pintar 32 escenas de óleo sobre tela para la Iglesia de las Agustinas, de la vida de San Agustín.
“El Divino amigo de los niños” pertenece a la primera etapa moralista del pintor, al igual que títulos como Sin pan, Humanidad, Mercado de blancas, El vicio infernal, El Divino carpintero, esta última obra comparte personaje con “El Divino amigo de los niños”, misma fisonomía y vestiduras, por lo que quizás, formaran juntas una composición temática narrativa.
Un gran amigo de Rebolledo, Fernando Santiván, en uno de sus artículos, relata un episodio que bien pudo ser la inspiración para la creación de “El divino amigo de los niños”
“cuando el pintor no tenía aún popularidad que obtuvo más tarde, se detenía a menudo ante los duros bancos de la Alameda para contemplar un extraño hacinamiento de cuerpos y harapos. Eran niños vagos, canillitas de la prensa. No tenían techo que los protegiera del frío de la noche ni almohada en donde reclinar la cabeza. Benito sufría ante el sombrío cuadro de miseria. Hubiera deseado hacerles grata la vida y ofrecerles una palabra de solidaridad, pero los muchachos eran huraños. Según esta fuente, la pintura se dio a conocer 1 año después de ser creada.
Esta pintura es vista por el artista como una forma de contrarrestar lo feo, lo malo, un instrumento para “educar” y “enseñar”. Se sabe por el artículo de 1959, de la revista En Viaje, que Rebolledo “consideraba los planteamientos de la Biblia como una filosofía integral y permanente” por lo que, para él, es una fuente de inspiración y recurre a ella, para representar capítulos que él consideraba importantes para la conciencia moral de la sociedad. Rebolledo tiene necesidad de unir su fe cristiana en su obra artística, y tiene la oportunidad de pintar 32 escenas de óleo sobre tela para la Iglesia de las Agustinas, de la vida de San Agustín.
“El Divino amigo de los niños” pertenece a la primera etapa moralista del pintor, al igual que títulos como Sin pan, Humanidad, Mercado de blancas, El vicio infernal, El Divino carpintero, esta última obra comparte personaje con “El Divino amigo de los niños”, misma fisonomía y vestiduras, por lo que quizás, formaran juntas una composición temática narrativa.
Un gran amigo de Rebolledo, Fernando Santiván, en uno de sus artículos, relata un episodio que bien pudo ser la inspiración para la creación de “El divino amigo de los niños”
“cuando el pintor no tenía aún popularidad que obtuvo más tarde, se detenía a menudo ante los duros bancos de la Alameda para contemplar un extraño hacinamiento de cuerpos y harapos. Eran niños vagos, canillitas de la prensa. No tenían techo que los protegiera del frío de la noche ni almohada en donde reclinar la cabeza. Benito sufría ante el sombrío cuadro de miseria. Hubiera deseado hacerles grata la vida y ofrecerles una palabra de solidaridad, pero los muchachos eran huraños. Según esta fuente, la pintura se dio a conocer 1 año después de ser creada.
Gestión
Adquisición
Forma de ingreso
Compra
Procedencia
Benito Rebolledo Correa
Fecha de ingreso
1925
Registradores
Marianne Wacquez Wacquez, 2022-10-14